Historia del vestuario infantil
Durante años, la ropa infantil estuvo fuera de los mandatos de la moda, tanto niños como niñas eran vestidos de manera indiferente lo que hacía imposible distinguir entre un sexo y otro. La evolución de la moda infantil comenzó en el siglo XVII y desde entonces, no ha parado.
En la Antigua Grecia, los niños, indiferentemente de su sexo, usaban el quitón, una especie de túnica elaborada con paños de lino.
En la Antigua Roma, los niños y niñas cuando nacían eran fajados y, posteriormente, empezaban a usar túnicas rectas que, a las niñas, ajustaban con un cinturón.
La evolución de la moda infantil comenzó en el siglo XVII cuando tanto diseñadores como fabricantes vieron la necesidad de confeccionar ropa que prestara mayor comodidad y fuera menos restrictiva para los pequeños. La moda infantil logró imponerse a lo largo del siglo XVII y XVIII brindando a los niños y niñas la opción de vestir prendas mucho más cómodas y casuales.
En el siglo XVII, el bebé, con independencia de su sexo, usaba hasta los cinco o seis meses de vida, trajes largos cubiertos de un delantal y, la ropa interior, estaba compuesta por una camiseta y un pañal de paño. Cuando dejaban de usar esa ropa, pasaban al traje que imitaba el traje de sus padres, usándose el mismo tejido y corte.
Por aquella época, la moda infantil se reducía a trajes de corpiño que se ajustaban a los pequeños para acostumbrarlos a mantener una postura erguida. Además, se impuso la moda de vestirlos de blanco.
Poco a poco, se empieza a distinguir entre sexos, y el traje que utilizaban las niñas pasa de los tobillos a las rodillas. Eso sí, las piernas eran tapadas con medias negras para que no quedaran al descubierto. Con el tiempo, la moda de las rodillas desnuda se impuso tanto para niños como para niñas.
El traje marinero, fue el que causó furor en la moda infantil a mediados del siglo XIX, tanto para niños como para niñas. Los niños lo llevaban con pantalón largo y las niñas, con falda. Para completar el modelo, blusa de manga larga con cuello en color azul marino y galones blancos.
No fue hasta primeros del siglo XX cuando la moda infantil evoluciona y los pequeños comienzan a llevar trajes diferentes a sus padres. La moda infantil empieza a ser más suelta y cómoda destacando las prendas en color blanco. Se estilaba pantalón corto y calcetines hasta las rodillas.
A primeros del siglo XX se empieza a usar el punto para adaptarlo al bebé y en ese mismo periodo, se empieza a vestir a los niños de azul y las niñas de rosa.
Por fin, en los años 80, se produce un cambio cultural en el que empiezan a predominar textiles cómodos y, los bebés, niños y niñas son los primeros en utilizar este tipo de prendas.
La moda infantil, a día de hoy, refleja la personalidad de los pequeños. En la actualidad, en el mercado, podemos encontrar prendas cómodas y casuales. Prendas infantiles para cada ocasión que se salen de los rosas y celestes.
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